En un encuentro de la Regional juvenil alicantina entre el Jove y el Santa Pola, un jugador del segundo equipo agredió sin previo aviso a un futbolista de apenas 17 años, propinándole un codazo en el cuello de manera brutal.
El agresor, además de la violencia física, se burló continuamente del joven afectado, generando una situación aún más impactante. La agresión dejó al joven futbolista desplomado en el suelo, sufriendo una “fuerte contusión cervical” que le impide incorporarse debido a náuseas y mareos, según el parte médico.
A pesar de la gravedad de la situación, el árbitro del encuentro, Alejandro Serna Vázquez, abandonó el campo sin interesarse por el estado del futbolista, provocando la indignación del club Jove Español.
El agresor, de 18 años, fue expulsado del partido según el acta arbitral, pero la gravedad de la situación llevó al club afectado a emprender acciones legales. El informe médico refleja que el jugador estuvo en riesgo vital tras la agresión, perdiendo la consciencia y comenzando a convulsionar.
El Jove Español ha expresado su molestia por la falta de acción inmediata por parte del árbitro y ha denunciado el incidente ante el Comité de Competición. Ante la posibilidad de que el seguro no cubra la agresión al no estar el balón en juego, la madre del menor ha presentado una denuncia ante la Guardia Civil.
Este no es el primer incidente protagonizado por el agresor, quien ya tuvo que ser sustituido en un partido anterior por una situación similar. El club Jove Español aboga por la formación en valores en el fútbol base y espera que este tipo de comportamientos desaparezcan del deporte.
El equipo, consternado, planea rendir homenaje al joven afectado en su próximo partido de liga como muestra de apoyo y solidaridad.
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